Hay algo que caracteriza a la MUGER MODERNA, y en particular las ADOLESCENTES NÚBILES, y esto es ser unas ACOMPLEJADAS de MIERDA. Tienen una amplia y variada gama de complejos, que las hace en su mayoría INFUMABLES. Entre estos quiero destacar el más característico y relevante al tópico, el que se denomina en psicoanálisis como variación AUTÍSTICA del líbido.
Se trata de la MENTE FEMENINA para la cual el centro de su líbido es exaltar de todo lo que puede hacerlas objeto de atención sexual del hombre, o en otras palabras ser una CALIENTACHOTAS. Esto se ve en acciones como, entre otras, usar ropa que muestra el ORTO, la PANZA, el ESCOTE, las PIERNAS, y puesto generalmente la mayor superficie de PIEL. Esta clase de acción muchas veces es justificada como liberación feminista, escusa que para cualquier persona con un par de neuronas es obviamente tal.
En verdad, esto les proporciona un placer PSICOLÓGICO TRANSPUESTO, o puesto en palabras vulgares, les caliente la CONCHA MENTAL más que la física. La MINA de este tipo prefiere el placer mental por encima del placer específico y concreto de sexo normal. Es más, siente una insensibilidad por el sexo, en ciertos casos hasta una inhibición o REPULSIÓN, a simple vista paradójica, la cual se puede adjudicar a otros complejos psicológicos como el daddy issues y otros que también son comunes, e incluso se pueden ver como raíz parcial de este LÍBIDO AUTISTA.
El tiro les sale por la culata cuando, a causa de la moda moderna del acercamiento a todo lo bajo (quizas en este caso en conjunto con una rebelión contra su padre, el cual en su mente es un patriarca opresor, pero en realidad es un dominado), se encuentran con un SIMIO de las castas más bajas o las razas inferiores, el cual es guiado principalmente por la CABEZA de su PIJA, y frente al calentamiento de sus zonas inferiores que le produce la TURRITA recurre al instinto y la imposición muscular. La MUGER entonces termina MUERTA y VIOLADA en el medio de una zanja, esto por supuesto si el MONO tiene suficiente frente como para calcularlo. Al mes, y contiguo a las marchas femibolches que exigen la castración de todo hombre, el PRIMATE es ejecutado a palazos en medio de una calle de tierra, por una patota de sus igualmente PRIMITIVOS congéneres, en contra a cualquier concepción de justicia, todo esto caracterizado por un alma matriarcal, demagógica y primitiva.
Volviendo al tema, estos tipos femeninos, o poniendolo de manera franca y popular, estas TURRITAS, las cuales son muchas veces de clase media alta pero de ninguna manera limitadas a esta; deben clasificarse precisamente entre una de las causas que más alimentan la atmósfera de LUJURIA CEREBRAL, CRÓNICA y DIFUSA de nuestra época.
Quiero expandir sobre esta última caracterización. La PANDEMIA MODERNA del sexo tiene como carácter PROMINENTE la CEREBRALIDAD.
Al contrario que con el enfermito libertino de la revolución francesa, el declive romano, o cualquier otro periodo de decaimiento civilizacional, el cual era EXUBERANTE, del EXCESO FÍSICO, sin INHIBICIONES, VIOLENTO, el sexualismo de ahora tiende a la esfera psíquica, a la gravitación constante hacia el amor y la mujer.
En esta hay dos características, la primera, una exitación difusa y crónica, la cual es independiente de la satisfacción física y concreta; y la otra, en parte causada por la primera, la coexistencia de este eroticismo devenido con la total falta de sexo real.
El BETA MODERNO, (y bajo esta caracterización caen la gran mayoría de hombres actuales) gasta mucho más de su tiempo pensando sobre sexo, más que el hombre del pasado (en el cual se restringía la vida sexual y por lo tanto parece intuitivo que se pensara más en esta, aunque no sea cierto), y más incluso que el libertino de épocas pasadas.
