>>125016 (OP)
Una guerra implica que hay a lo menos 2 bandos en disputa; y eso no fue así porque literalmente ellas pelearon solas… y perdieron. Sólo hay que ver el alcance que tuvo la primera gran marcha feminista con la segunda. Mientras en el primer caso los medios hablaron del tema por semanas, en el caso de la segunda al par de días ya nadie se acordaba. ¿Porqué? simple: Ya no tiene el mismo impacto ver a weonas en pelota en la calle quejándose. Politizaron y exageraron tanto el mensaje que pasó de lucha social a discurso de odio. Y le guste o no a estas weonas, a la gran mayoría de los chilenos (mujeres y hombres) no les interesa apoyar discursos de odio o ideas weonas.
La mayoría de la población local entiende que hay, efectivamente, cosas que mejorar en pos de una convivencia social más justa y sana para todos por igual. La mayoría cree que se está trabajando en ese sentido, por eso no les interesa escuchar a princesitas burguesas con las tetas al aire, al son de una batucada, webeando y exigiendo más y más privilegios que son evidentemente injustos. No es culpa ni del machismo, o una sociedad retrógrada o nada por el estilo. Simplemente la gente tiene un montón de problemas que necesitan solución y no ven ningún aporte real para el total de la sociedad en el movimiento: "¿En que me beneficia a mi?", la respuesta es: "en nada, pero a mi me beneficia mucho". "¿Sólo a ti o a todos?", la respuesta es: "Emmm, no, pero a mi y a mis compañeres si".
Ahí es cuando la gente promedio las manda a la chucha; y no les compra el discurso que ya no tiene el impacto de antes. Literalmente no hicimos nada y estas weonas están peleando solas. Y la gente las ve cada vez más locas y weonas por discutir con piedras.