Es una frase simplista. Hay cuestiones en las que el tiempo pasado fue peor, como la dificultad de obtener servicios, recorrer distancias, comunicación, etc.
En otras, mejor, como la libertad de unos diez años atrás de dar una opinión políticamente incorrecta, la privacidad, o la calidad de algunas series, películas o productos.
Siempre depende.