Lukitas requiere de un sacrificio que lo acompañe por la eternidad en el limbo para por fin descansar en paz y purgar /choroy/ de todos sus lamuelitos. La Paula o la Symia tendrán que cabecear un metro, o quizás las dos, nuestro chanchito era golozo. También puede ser el Ave, ahora que conocemos los gustos escondidos del cerdo JJJAAAAAA.