Un informe televisivo de Canal Trece muestra cómo una comunidad de ciudadanos bolivianos que residen en la localidad de Ezpeleta, en la provincia de Buenos Aires, cercaron ilegalmente con rejas la calle de entrada a un barrio al que llaman “El Barrio Andino”, cerrando así también las calles aledañas. La mayoría de sus habitantes proviene de Potosí, ciudad en el altiplano sur de Bolivia.
Colocaron rejas para “marcar fronteras” con Quilmes, no dejan pasar a los argentinos que transiten libres por su cuenta y hasta tienen un “Presidente”: Wilson Quispe, el cual lleva su tercer mandato, y es el que ordena cuándo se abre la reja y cuándo no, quién puede usar la calle (que es pública) y quién no. Dejando pasar de forma totalmente arbitraria por ahora únicamente a las parejas argentinas de los ciudadanos bolivianos que residen en el barrio.
Si bien la comunidad se define como autónoma, sus habitantes sacan la basura fuera del barrio para que sea recolectada por los camiones comunales.
Como si fuera un país independiente dentro del municipio quilmeño, afirman que consiguieron el aval comunal durante la gestión del ex intendente kirchnerista "Barba" Gutiérrez.
DE PELÍCULA