Tiene contactos y buenos abogados además de prestarle el chico a Julio Dittborn.
Recuerda que Luksic movió cielo, mar y tierra, primero para prohibir la publicación del libro "Impunidad dipliomática", y luego para que Fiscalía metiera preso a un pobre hueón que tuvo la peregrina idea de hacer una inocente cuenta parodia.